A Aracruz Celulose sofreu a baixa de três integrantes do conselho de administração e seus respectivos suplentes, que renunciaram aos cargos em meio à crise enfrentada pela empresa desde o anúncio das perdas com derivativos cambiais exóticos.
. Os membros que deixaram a companhia são apontados como representantes da família Lorentzen, uma das controladoras da companhia, ao lado dos grupos Safra e Votorantim, cada um com 28% das ações ordinárias (ON, com direito a voto).
. Por trás da saída dos conselheiros está o delicado equilíbrio entre os sócios da Aracruz. A barbeiragem financeira interrompeu o processo de fusão da maior produtora mundial de celulose com a Votorantim Celulose e Papel (VCP).
. As informações são da Gazeta mercantil.
Um comentário:
ALIBARBUDO enganou o MST,braço,......, do PT.
www.Elpais.com.
La asignatura pendiente de Brasil
Lula no ha cumplido su promesa de un reparto justo de tierras cultivables
Afrontar dicha reforma significaría acabar con una de las mayores injusticias que aquejan a este gigante económico: La situación actual apenas ha cambiado, y Brasil, en sus 500 años de historia, nunca ha dividido la tierra, que continúa en las manos de unos pocos privilegiados.
Es el único país, con un inmenso territorio bajo su control, que mantiene una distribución de la tierra semejante a la de su fundación, la realizada durante la colonización portuguesa, que concedió a un pequeño grupo las famosas Capitanías Hereditarias, inmensos latifundios cuyos propietarios podían a su vez distribuir a su antojo. La tierra no se podía ni vender ni comprar.
En este momento existen en Brasil 27.556 latifundios con más de 2.000 hectáreas cada uno, lo que supone el 43% de la tierra, la mayoría de ellos improductivos. "Conmigo no necesitaréis invadir las tierras porque yo os las voy a dar".
De esa forma, los Sin Tierra continuaron invadiendo tierras no cultivables e incluso cultivables en mayor número que con el Gobierno anterior del ex presidente Cardoso.
El lobby más poderoso en el Parlamento brasileño, un número de diputados capaces de paralizar cualquier votación, lo constituyen los llamados ruralistas, defensores del actual sistema de latifundio.
Los Sin Tierra responden a estas críticas acusando al Gobierno de no cumplir las promesas a los campesinos de facilitarles los prometidos instrumentos de labranza y créditos para las explotaciones. Mientras tanto, los conflictos en el campo no disminuyen, y cada día las crónicas hablan de muertes causadas en enfrentamientos con los colonos, que, armados hasta los dientes, responden con ametralladoras a las piedras y hoces de los Sin Tierra.
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